Do it, do it, do it

Just face the challenge and you will make it possible




sábado, 30 de octubre de 2010

2010 Home de Ferro. Quedan horas para el desenlace ...

Llegada a Ibiza. Tiempo nublado y con viento. El hotel está bien y se puede ver incluso la salida de la natación desde lo alto. Estoy en el séptimo piso y la vista es preciosa, lástima que haya hecho mal tiempo todo el día. Facturamos las bicis y nos indican que se modifica el recorrido de natación por el mal tiempo previsto para mañana: viento y riesgo de lluvia, con vientos máximos de 70 km/h. El mar estará picado y nos indican que el circuito de natación serán 3 vueltas más cortas, 1600 m aprox. cada vuelta. Encima, mis compañeros me informan que la ida será con el viento de cara. Cuando se da la vuelta, la primera rampa es del 15% aunque luego se suaviza. Qué fuerte! Creo que me quedo durmiendo. La bajada a Ibiza puede ser muy rápida y peligrosa. Espero que la gravilla no haga de las suyas, ya que un compañero ha hecho el reconocimiento y me ha comentado los riesgos. Luego, la subida en la carrera a pie al castillo impresiona, he estado paseando esta tarde y aunque no es muy elevado, no tengo ganas de subir tantas veces. Esto va a ser agotador!!! Mejor no pensarlo. El lunes descansaré bien. Ya os contaré. Alea jacta est!!!!

viernes, 29 de octubre de 2010

2010 Home de Ferro. La cuenta atrás

Pues me quedan dos días ya para el último triatlón de la temporada. Me entero que los de Iberia miseria me van a hacer pagar por meter la bici y no estoy muy contento. No me han hecho pagar ni los de Lufthansa ni los de Air France y ahora estos me van a hacer pagar el impuesto revolucionario. Bueno, mañana lo sabré.

He consultado la lista de inscritos y es acojonante. Entre los de élite que son unos 70 y los clasificados de grupos de edad hacen más que los 40 que somos "invitados" en la categoría open. Nos van a barrer!!!! Me veo entrando de los últimos, hahahaha.

Tenemos un circuito de dos vueltas en la playa de les Figueretes en Ibiza ciudad. Distancia 4 km


Luego el circuito ciclista son 3 vueltas a un circuito de 40 km: total 120 km. La primera parte tiene una subida del 1% para llegar cerca desde donde divisaremos Es Vedrá, un islote deshabitado, de cuya vista podremos disfrutar. En la vuelta se nos presenta un ascenso de 2 km del 8% y descenso suave hasta Ibiza. El camino hacia Es Vedrá es asfaltado pero he podido comprobar que se trata de un camino estrecho (se sale de la carretera principal), por lo menos desde Google Earth.




El circuito urbano de carrera a pie no es tan atractivo según mi punto de vista como el recorrido a pie de Santa Eulalia, aunque pasamos por un tramo con vistas al mar, cerca del hotel de la organización en playa de Figueretes y por el centro de la ciudad, por el paseo, pero también hay algún tramo aburrido, que no despliega lo mejor de Ibiza ciudad. Un atractivo es el castillo, que proporciona a la prueba una mayor dureza. Se sube al castillo (al menos aquí se alegra un poco la vista) en un ascenso por terreno duro y empedrado y más después de tanto tute. Van a ser 4 vueltas de 7,5 km muy dolorosas, hehehe.



Veremos cómo responde mi cuerpo esta vez. He descansado bastante, apenas he entrenado estas dos semanas, me cuesta concentrarme en salir a correro incluso ir a nadar. El sábado pasado hice 100 km de bici con el grupo y el domingo hice 60 km con la "cabra" en solitario y esta semana apenas he salido a correr suave. Mis compañeros ya hace tiempo que acabaron la temporada y yo ya tengo ganas de descansar unas dos semanas para luego reanudar los entrenamientos de la nueva temporada. Ahora queda preparar las maletas y rumbo a Ibiza!!!! Ya os contaré si al final tiene un atractivo mayor del esperado!!!!

domingo, 17 de octubre de 2010

17.10.2010 Garmin Barcelona Triathlon

Este triathlon tiene el atractivo de realizarse en la ciudad de Barcelona y además, de ser el 5º triathlon del mundo en cuanto a participantes se refiere. Me quedé corto el otro día, cuando me comunicaron los inscritos. Hubo más de 6.500 participantes en las diferentes modalidades: olímpico, sprint, super-sprint, relevos. Fue un buen día para dar a conocer el triatlón a todo amante del deporte de resistencia, tanto los experimentados del tri, como los de otras disciplinas que participaban por primera vez, como la gente que se acerca por primera vez a este deporte.
Ganó Gómez Noya en la modalidad de élite masculina y Jodie Simpson en femenina. El resto de los mortales, participamos en diferentes olas; a mí me tocó la segunda ola (tercera salida) y no sé exactamente cuál fue su criterio de asignación, lo bueno que empecé y acabé pronto. Mi clasificación? 209 de más de 1800 participantes que acabaron el triatlón olímpico (1,5 km de natación; 33 km de bicicleta; 10 km de carrera a pie). El circuito de bicicleta se ve reducido por las obras. Mi tiempo: 2 h 15 min. Esperaba realizar mejor tiempo pero por no sentirme en óptimas condiciones no pegué el hachazo, hehehe. La anécdota es que participó Carlos Checa en categoría de élite, si bien, hice mejor tiempo que él, hehehe. En los foros leo que también participó Ricardo Bofill, alguno ha dejado comentarios graciosos.
Organización: Muy buena, información por escrito correctísima, campaña publicitaria increíble, seguimiento en Facebook. Cuando llegamos, el despliegue informativo y de ayuda fue correcto y los servicios como guardarropía, asignación de dorsales, etc. funcionaron correctamente. Faltaron WC's, las colas eran interminables!!! Organización de la carrera muy buena, con los despistes de última hora podías saber fácilmente donde empezaba la prueba, las transiciones y los recorridos. Jueces de la federación actuaron con manga ancha porque había gente que no se conocía las normas. Algunos no se habían puesto el dorsal y a más de uno vi corriendo en el segmento de carrera a pie con casco. Incluso yo cometí una infracción que me hubiera significado una amonestación. En los foros se comenta que los más inexpertos fueron al principio, enseguida después de los de élite y eso explica que más de alguno en las otras salidas hubiera vivido situaciones de peligro, como las que viví yo en el triatlón de Valencia. En algún blog de algún voluntario de la prueba, se comenta incluso que había un tío que quiso meter una maceta con un geranio detrás de la bici. Como oís!!! Y encima se quedó como que muy triste el chico cuando le dijeron que por seguridad no podía llevarlo. También, más de alguno llevaba un ipod, cuando la guía del triatleta lo indicaba correctamente.
Natación en la playa de la Mar Bella. Estoy hecho un hacha: he hecho el parcial nº 133, hehehe. Me toca la salida nº 2, todavía no sé qué criterio utilizan para asignarlas. Quizá no me consideraron como federado catalán, por eso salí más pronto. Agua fresquita por la mañana, no sentía casi los pies. Noté que algunos iban muy desorientados, eso indicaba que era la primera vez que hacían un triatlón. El agua no estaba muy limpia pero se podía nadar. Las olas no eran muy exageradas a pesar de que se notaba el viento. El recorrido a pie hasta boxes me hace ir casi ahogado, no podía respirar: entre el peso del traje de neopreno mojado y las subidas, pasé un mal rato. Normalmente esta es la transición que paso más mal.
Bicicleta. Circuito casi plano de bici, con circulación por grandes avenidas. A pesar de mi temor en el que se iban a formar grandes grupos, entre grupos más rápidos y de doblados, no vi grupos compactos, ni pude hacerme con un grupo grande. Los dos grupos más rápidos que vi iban más rápido que yo y no los podía seguir. Además, iba atrancado por el frío durante los primeros kilómetros, así que solo pude rodar con unos pocos compañeros durante un tiempo, adelantando a los más inexpertos, que les era imposible ponerse a nuestra rueda. No viví situaciones de peligro, salgo a alguno que otro que se le caía un bidón a tierra. En cambio, otros compañeros valencianos me contaron que vivieron ciertas situaciones de pánico, ya que los más inexpertos se metían por medio, ocasionando alguna situación de peligro. Al llegar al final del circuito me pasé de la señal de parada, la verdad es que me confundí porque un chico del staff me indicó que podía seguir recto sobre la bici y cuando sigo adelante, otra persona me indica que me baje inmediatamente, con lo cual si hubiera frenado de golpe, hubiera sido caída segura. Me indica que esa maniobra está muy mal. Temía una descalificación, pero yo no vi ninguna señal de puesta a pie a tierra, o al menos no me pareció verla.
Carrera. En la carrera no me siento apenas los pies, apenas siento las zapatillas cuando me calzo. Salgo corriendo y siento sensaciones extrañas al pisar. Voy cogiendo ritmo de carrera pero noto que no voy tan rápido como en Canet, y eso que esta prueba son “solo” 10 km. Me noto atrancado y que mi ritmo no es el adecuado. Adelanto a varios ciclistas que me habían pasado en el segmento de la bici pero por otra parte, veo que gente me caza en la carrera. Esto es algo que no estoy acostumbrado a asumir, por lo tanto, veo que mi ritmo de carrera no va fino. En el parque de la Ciutadella me siento mejor y me voy acelerando hasta el km 8; empiezo a bajar el ritmo y a sentirme mal. El último km se me hace interminable y no puedo esprintar, siento un dolor atroz en el estómago. En un momento dado, pienso que me quedo allí. Me acuerdo que apenas había desayunado y eso da una explicación a mis sensaciones. La próxima vez, me llevaré el desayuno de casa. Confiaba en que habría una tienda abierta por la noche del sábado pero en la zona donde me hospedé solo había hoteles, bares fashion y edificios de 20 plantas. Para hacerme con algo de desayuno, tuve que desayunar un gel, una barrita energética que daban y unas mandarinas que guardaba en el coche.







martes, 12 de octubre de 2010

2010 Triathlon d'Alpe d'Huez. Entrer dans la légende

Triathlon Alpe d'Huez 2010. Una prueba de resistencia de lo más duro que he hecho. 2,2 km de natación en agua a 15ºC, 115 km de bici de lo más duro, terminando en el Alpe d'Huez y 22 km de carrera a pie en un circuito duro a 1800 m y 2000 m de altitud. Cómo llegué a Alpe d'Huez? Pues en el triatlón de Elche, en abril de 2010, llegó a mis manos una publicación de triathlón y entre tranto folleto, había una información sobre esta prueba. Me dí cuenta que era un miércoles de julio, la última semana, unos días bastante inasequibles si no tienes vacaciones. Envié un correo a la lista de correos por si había alguien interesado pero no, no hubo respuesta, salvo algún compañero que me envió información sobre alojamiento. Llevo practicando un triathlón de media distancia por mes prácticamente, así que me tocaba algo más fuerte para cerrar el mes de julio. Previamente, había hecho el I triatlón de media distancia de Hellín (Albacete) y necesitaba algo más. Así que, solo, sin feed-back de conocidos y no conocidos, me decidí a preparar la logística. Tras varias consultas y un cálculo de costes, ví que la opción más barata era ir en tren hasta Barcelona, tomar un avión de Air France hasta Lyon y alquilar un pequeño utilitario hasta Alpe d'Huez.

  


Alpe d'Huez es una conocida estación de esquí en los Alpes franceses, donde pasa una etapa del Tour de Francia. Es un puerto fuera de categoría y coronar los 1850 m de altitud es hacer leyenda junto con las grandes figuras del ciclismo. Y lo digo porque es de las pocas oportunidades que hay de emular a las figuras del ciclismo en una competción, por el mismo lugar donde pasan ellos. Todos los años, una procesión de ciclistas de todas las partes del mundo sube los 15 km desde Bourg d'Oisans y alcanza el fin de esta etapa del tour. Desnivel promedio: 10%, los primeros kilómetros son los más duros. En verano, ascienden centenares de ciclistas todos los días. Al llegar al último kilómetro te espera un fotógrafo, que te da un código para que veas tu foto. Si te gusta, pagas y te quedas con tu recuerdo. Tiempo promedio de ascenso: 1 h 15 min. aprox. 1 h los ciclistas bien entrenados; 37 min. se la hizo Pantani. Los jueves te la puedes subir de forma cronometrada y obtener tu diploma.



Bien, pues esta prueba se está mostrando como una de las pruebas que irá a más en el calendario international de triathlón. El año que viene harán su 6ª edición y se esperan más de 3.000 atletas de todo el mundo el año que viene, que se repartirán en la prueba larga y la corta. Triathletas de Francia, España, Alemania, Reino Unido, Irlanda, Italia, R. Checa, Noruega, Dinamarca, Suecia, y otros países de Europa, así como de EEUU, Canadá, Nueva Zelanda, Sudáfrica, Australia se dan cita en este evento.

La natación se realiza en el lago de Verney, que forma parte de una central hidroeléctrica de la EDF. Única salida; 1000 triatletas toman la salida a la vez. La temperatura del agua por esa fecha ronda los 15ºC y 16ºC. Recomiendan ponerse dos gorros de natación. Incluso para mí, es un agua muy fría, nada que ver con el mediterráneo. Incluso el río Júcar a su paso por Antella me parece una sopa de verduras. Después de 2,2 km de natación en agua a esa temperatura, me duelen los músculos de la cara. Posición 130 y pico, eso demuestra que soy una máquina nadando, hehehe.



El segmento ciclista tiene una primera parte de 25 km de descenso rápido y sin complicaciones a una velocidad e 60 km/h. Debes utilizar los manguitos porque el frío es notable. Luego comienza un puerto de más de 20 km con un 3% de desnivel hasta los 1370 (Col de la Grand Sèrre). Sigue un descenso, hasta luego volver a ascender el Col d'Ornon a 1371 m. Durante este ascenso me dió una pájara y como pude llegué a la cima, donde me esperaba un buen avituallamiento. Sin dejar de pensar un solo minuto si dejarlo/no dejarlo, repuse fuerzas. En el descenso podía apreciar la belleza del paisaje, a pesar de las curvas cerradas, en la que sentía arroyos y ríos y el ruido de las hojas de los árboles. Esto me tranquilizó y pude hacerme con más fuerzas. En este momento, juré que no me iba a rendir en esta prueba. Comienza el ascenso a l'Alpe d'Huez desde los 700 m de Bourg d'Oisans, un pintoresco pueblo. El ascenso es descorazonador, las primeras rampas son una verdadera tortura y más cuando ya llevas 100 km encima. Además es el segmento más duro del ascenso. Los 21 virajes están señalizados y cuentas cada curva que te falta: 19, 18, 17, 16 ...

Lo bueno es que en cada curva el terreno se allana y puedes relanzarte. Algunos paran y el efecto es mimético; si ves uno parado, tú paras, así que no hay que mirarlos hehehe. En esta parte del ascenso me sentí mucho mejor pese a su dureza. Subía adelantando a mis competidores. Existe avituallamiento a mitad de camino y puedes parar. Se me ocurrió orinar, pero sentí un dolor intenso en la próstata, así que desistí. El poco líquido que salió de mí tenía el color de la coca-cola y un olor como a acetona: la deshidratación era notable. Seguí subiendo hasta que a los 1700 m noté un mareo, como si mi cabeza fuera a estallar. Además, notaba que las piernas las tenía como más agotadas y mi respiración era más sonora; estaba notando la falta de oxígeno, imperceptible apenas si no realizas ninguna actividad pero notable durante un ejercicio de intensidad alta. Llegué a la zona de transición sin problemas.



La carrera se realiza sobre asfalto duro y camino de tierra y piedras. De 1800 m se pasa a una cota de 2000 m por los caminos que van a las pistas de ski. La respiración se hace difícil, es imposible no sentir ganas de parar, casi todos paran. La coca-cola y el plátano me dan retortijones y no puedo correr bien. Luego paso al agua y cambio el plátano por la sandía. Me siento mejor. Saco mis últimas fuerzas y pienso en no parar. Sigo adelante y corro mejor todavía. Al final llego a meta. Pienso que no voy a volver nunca más aquí. Ahora pienso que quizás vuelva otro año, de momento no he puesto fecha. Mi tiempo total: 9 h 20 min. Si vuelvo es para reducirlo. Si no me hubiera dado una pájara en el segundo puerto, quizás hubiera hecho 1 h menos. Lo importante es que acabé lo que me propuse y aunque el esfuerzo fue sobrehumano, no tuvo que ver nunca con esos videos de competidores de larga distancia que apenas se pueden mantener en pie.

jueves, 7 de octubre de 2010

Challenge Barcelona

Hace un año me convertí en un Ironman Finisher. Pero este año no me he podido vengar esta vez. Esta vez decidí cambiar el Challenge Barcelona por el Home de Ferro de Ibiza, que se celebrará el 31 de octubre. No ha habido revancha con mi amigo Miguel Ángel, ni tampoco contra mí mismo, para bajar de 12 h, tal como me prometí a mí mismo, que nunca volvería a hacer un ironman sin el suficiente entrenamiento. Este año no me he podido medir con la crème de la crème del triatlón internacional: gente de EEUU, Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Alemania, Francia, Inglaterra, y por supuesto españoles de todos los lugares del país, que vienen a medir sus fuerzas y probar el gran desafío de esta prueba. Recuerdo que entrené poco porque tuve un accidente y pasé el agosto más aburrido de mi vida con el brazo escayolado, sin poder nadar, ni entrenar suficientemente en bici. Me tenía que quitar la escayola a escondidas y con una férula rígida entrenaba, sin poder apoyarme bien con el brazo y rezando para no tener que hacer una frenada brusca. Corría como podía con escayola. Finalmente, pude mantener el tipo en septiembre y pude ir a primeros de octubre a la cita. Mi primer Ironman: 3,8 km de natación, 180 km de bicicleta, 42,2 km corriendo. Qué sufrimiento! Qué dolor! Más de 12 horas sufriendo!!! Recuerdo que la natación me salió perfecta, la bicicleta, pese a lo poco que había entrenado, me salió a un promedio de 32 km/h hasta el km 140, cuando empecé a romperme. Finalmente se me quedó en 29,6 km/h, sin muchas complicaciones. Recuerdo como aún así adelantaba a gente con Cervélos y Argon 18 estratosféricas y como me adelantaban a la vez triatletas con bicis de hojalata, hahaha. Pero la carrera: de nada me sirvió ser antiguo maratoniano, cuando bajé de la bicicleta no podía ni pisar porque no me sentía los pies. El agotamiento había hecho mella en mí y los calambres eran espantosos. Las contracciones involuntarias de mis músculos eran visibles y hasta las mujeres del público se asustaban al verme las piernas. Las dos primeras vueltas hasta el km 21 fueron un auténtico infierno, estaba completamente deshidratado y los geles no me surtían ningún efecto, tenía ganas de vomitar y su sabor me causaba náuseas. Finalmente, el plátano me salvó del retiro; empecé a recuperar fuerzas por el aporte energético y de electrolitos y pude realizar una mejor carrera, adelantando a los que todavía estábamos sufriendo. Lástima que no lo hubiera sabido antes, si no hubiera acabado mejor. Esprinté los últimos dos kilómetros intentando alcanzar a un francés, pero al final no pude con él. La euforia que senti cuando llegué a meta todavía me llena de emoción. Cuando llegué, nos sacaron la foto de rigor e hice el signo de victoria. Victoria contra el dolor, victoria contra las lesiones, victoria contra los inconvenientes que tuve para poder realizar la prueba. Recuerdo que una enfermera nos examinaba las pupilas y si veía que estábamos mal, nos llevaban al suero. No hizo falta, aunque en un momento dudó un poco; me era imposible mantener mis ojos en mirada fija, mis ojos iban perdidos y me daba la sensación que cada uno miraba a un sitio diferente. Finalmente pude seguir el camino recto, sin hacer eses. Tocaba recuperarse y ponerse como el kiko comiendo. Por la noche, cenábamos alegremente con mis compañeros Miguel Ángel y Rubén, dos finishers y las chicas y nos contábamos nuestras sensaciones y batallitas. Pensaba que me iba dar un colapso en la cena, porque comía sin tener hambre; se me había cerrado el estómago. Al día siguiente lo peor: levantarme a las 5 de la mañana para volver al trabajo. Paliza de 500 km para estar a las 10:00 h en Valencia, hahaha.


domingo, 3 de octubre de 2010

2 Octubre. Resumen Tri Canet de Berenguer 1/2 Ironman

Fin de semana triatlético en Canet de Berenguer. Buena organización pero faltaban detalles que enumeraré más tarde. Distancias oficiales: 1,9 km de natación, 90 km de bici, 21 km de carrera a pie. Los 1,9 km de natación me parecieron más largos quizá porque creo que me desvié un poco del rumbo, en cambio en el circuito de bici, mi registro me marca 82,37 km. La carrera a pie me pareció un poco más corta, quizás un km menos. Tiempo total 4 h 37 min. (me he pasado de la previsión de 5 h!!!). Clasificación general: 59 de 207 finalistas, aparte 14 retirados y 12 descalificados. Me ha salido mejor que en Elche, aunque el segmento de carrera en el 1/2 ironman de Elche fue muy duro. No está mal, ya empiezo a recuperar forma. La crème de la crème del triatlón de larga distancia, ganó Raúl Amatriain, del Lagunak Saltoki y David Castro, que quedó segundo. Tiempo del ganador: 3 h 47 min.Tiempo del último: 6 h 32 min.

Natación: Mar limpia, un poco agitada y con medusillas. Como íbamos protegidos con el traje de neopreno, no pasó nada salvo el tacto desagradable como si estuvieras acariciando gelatinas. El circuito era un cuadrado pero las boyas estaban un poco lejos. Me pareció que me desorienté un poco. Tuve que esperar a que me "cazaran" los de detrás para ir en grupo. Posición parcial del segmento de natación: 57 (como en los viejos tiempos!!!)

Bicicleta: Circuito de dos vueltas dirección Sierra Calderona hacia Estivella con ascenso suave y unos cuantos repechos durillos hasta los 200 m. Viento en contra durante la ida, bajada no pronunciada pero veloz desde la salida de Estivella sin curvas cerradas. Llaneo hasta Canet de Berenguer con ligero viento a favor. Al principio tenía los músculos atenazados y apenas llegaba a los 27 km/h, lo máximo que conseguía eran 30 km/h, el viento jugaba en nuestra contra y además con sensación de frío. Descenso rápido desde Estivella a 60 km/h; aquí empecé a notar la influencia de la aerodinámica. La posición agachada en el manillar de contrarreloj sumada a las ruedas de perfil alto y el perfil aerodinámico del cuadro me permitieron tutearme con ciclistas mejores que yo. Velocidad en los llaneos: 45 km/h incluso 50 km/h, guau!!! No está permitido "chupar" rueda pero veo que algunos de mis compañeros se mantienen inteligentemente a menos de 5 m y aunque no rueden en grupo, esto les beneficia porque luego me machacan. Tiempo total del segmento ciclista: 2 h 31 min. Posición del parcial ciclista 85. Velocidad media: 32,7 km/h del Garmin. Velocidad media según cronometraje: 35 km/h.

Carrera a pie: Aquí es donde empieza lo bueno. Empiezo a correr como una bestia y a tragar kilómetros. El suelo es empisado duro, ya ha salido el sol y empieza a apretar el calor. El avituallamiento queda lejos y empiezo sentir los efectos de la deshidratación. Tenían que haberlo puesto en el km 2,5 y no al 5 km!!! Menos mal que ya no es verano y el calor es medianamente soportable. Pruebo el primer avituallamiento y me cojo la botella y me la llevo. Así voy dosificando poco a poco y evito la deshidratación. Comienzo a adelantar a varios que me habían adelantado en el segmento ciclista. Cada vez corro más rápido. No sé qué ritmo llevo, porque el crono no se me puso en marcha (los botones iban duros), pero tengo la sensación de ir a un ritmo de entrenamiento medio. Mis sensaciones no suelen fallar. Estimación: 4,10 o 4,20 por km. La gente me anima y eso me hace ir más fuerte. Finalmente entro en meta como un rayo. Pulverizo mi record en medio ironman. Tiempo de carrera: 1 h 29 min. Ritmo de carrera: 4,16 min/km. Yo creo que se han comido algún kilometrillo, aunque todos los km estaban bien señalizados. Me sale el 55 mejor parcial de carrera, estoy que me salgo, hehehe.

Organización. Falta señalización en el circuito ciclista, más de alguno tomó la ruta que no era. Eché de menos ver más jueces en el circuito ciclista aunque por la lista de descalificados han hecho su trabajo (vamos, yo no los ví, pero hay descalificados). El avituallamiento flojo, cada 2,5 km debería haber un puesto de avituallamiento de líquido, no cada más de 5 km!!! Y el avituallamiento final, también flojo: falta tirador de cerveza!!!! Cerveza gratis por favor!!!! Bueno, esto es un extra que siempre considero como positivo a la hora de calificar bien la organización de una prueba. Por lo demás, estuvo bien organizada.